La Teología Fundamental, el cine y la espiritualidad

 La Teología Fundamental, el cine y la espiritualidad
América Latina & Caribe
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En memoria de Luis García Orso, s.j. (1944–2025).

 

P. Sergio Guzmán, S.J., autor en Desde la FeSergio Guzman SJ**

La Teología Fundamental es una disciplina de las ciencias teológicas que estudia los fundamentos y principios básicos de la fe cristiana. Estos temas tienen que ver con la realidad divina y cómo ésta se ma-nifiesta en la historia y en la vida de los creyentes; con el diálogo entre la fe, la razón y la cultura; con aquello que se vincula con el creer, con lo que da sentido y valor a la existencia. El padre Luis García Orso, s.j., fue profesor de esta materia durante muchos años.

Yo tuve la fortuna, por los años noventa, de que Luis fuera mi acompañante espiritual y compañero apostólico cuando trabajamos en las Comunidades Eclesiales de Base (cebs) en el Cerro del Cuatro, en Guadalajara, Jalisco. Y, después, de que fuera mi profesor de Teología Fundamental en el Colegio Máximo de Cristo Rey, en la Ciudad de México, por un año, en la etapa de estudios que en ese entonces se llamaba “Teología acompañante”, previa al Magisterio.Luis, como jesuita en formación, estudió Filosofía, Humanidades, Psicología y, finalmente, obtuvo el doctorado en Teología en la Facultad de Teología de Cataluña, con su tesis “Humanidad en lo no humano. Antropología de la liberación”.

Durante varios años, más o menos de 1982 a 1996, fue profesor de Teología, formador, superior de comunidades de estudiantes jesuitas y asesor en las cebs de la colonia Mezquitera, en Guadalajara. A finales de 1996 o principios de 1997 fue destinado a la Ciudad de México y ahí nos impartió clases de Teología a mí y a un pequeño grupo de jesuitas.Recuerdo bien todos los requisitos que pidió al grupo para poder tomar la clase de Teología Fundamental con él: escuchen las canciones del cantautor español Joaquín Sabina (que en ese entonces ya llevaba grabados más de diez discos, desde Inventario hasta Yo, mí, me, contigo), lean el libro Creer que se cree de Gianni Vattimo y ¿En qué creen los que nos creen? de Umberto Eco y Carlo María Martini, vean la película Kids, vidas perdidas de Larry Clark (que se había estrenado hacía poco en la Ciudad de México y que causó mucha polémica por la forma en que representaba a un grupo de jóvenes de Nueva York que se reunían en un parque a pasar el rato, tener sexo y consumir drogas), vayan un domingo al tianguis del Chopo de la colonia Buenavista (un espacio de la cultura alternativa y underground de la Ciudad de México, en donde se reúnen personas de diferentes edades y estilos a comprar o intercambiar ropa, libros y discos de música rock, punk y otros géne-ros). No se trataba de hacer alguna entrevista, sino de observar, aplicar los sentidos, contemplar, como nos invita Ignacio de Loyola en los Ejercicios Espirituales: “ver, oír, mirar y considerar, reflectir sobre uno mismo”.

Después de esta inmersión en la música, el cine, la literatura y en esos espacios culturales, en las primeras sesiones de su curso Luis desarrolló magistralmente el fenómeno de la postmodernidad; y, siguiendo al teólogo uruguayo Juan Luis Segundo, s.j., en su libro El hombre de hoy ante Jesús de Nazaret, nos hizo reflexionar sobre la fe antropológica y la importancia del creer.En el año 2016, cuando le pedí a Luis que me hiciera el prólogo o la pre-sentación de mi libro de los superhéroes, El creer de/en los superhéroes. Una mirada de fe a las películas de Marvel,escribió generosamente y de manera muy fina:

Éste es un libro pensado especialmente para adolescentes, sobre superhéroes y sobre la fe. [...] La propuesta del autor recoge tres preguntas fundamentales que todo joven lleva en su interior, aunque no siempre sepa cómo explicitarlas: ¿Quién soy yo? ¿Qué creo que le da sentido a mi vida? ¿Cuál es la misión en la vida? Tres cuestiones de fondo que todo adolescente se plantea, de una u otra manera, con estas palabras u otras, lo diga o no lo diga. [...] Este camino es el camino de su fe: de lo que cree y da sentido y valor a su existencia. Y quizá este camino lo conduzca mejor a encontrarse con el Dios de Jesucristo, que nos ama, nos acoge y quiere para cada uno lo mejor, y a creer en él con más hondura.

También le agradecí que me dijera personalmente que el primer capítulo de mi libro, “Fe, identidad y misión”, “es una muy buena síntesis de Teología Fundamental”. ¡Qué honor! Luis fue un gran ser humano, teólogo, escritor, formador y un maestro de vida, que nos ha dejado un importante legado que hay que saber aprovechar para seguir haciendo teología en diálogo con la cultura actual.Recordamos mucho a Luis también como cinéfilo, crítico de cine y maestro en el descubrimiento de imágenes del Espíritu (así, con mayúscula) en el cine.

En muchas revistas, como Xipe totek, han quedado sus análisis y lecturas que nos han emocionado, humani-zado y ayudado a creer en el Dios de Jesucristo con más hondura y compromiso. Por ejemplo, en el número 22 de Xipe totek encontramos un artículo que Luis tituló “Miradas en una Cinta de Sueños”, en el que nos confiesa algo de su pasión por el cine: “A los quince años ya estaba perdidamente enamorado del cine, ¡y qué remedio! La historia había comenzado mucho antes, cuando a los cinco o seis años de edad mis padres me llevaron a un cine de San Diego, California, a ver Bambi, y aquellas imágenes tan tiernas y fantásticas me encantaron”.3

Alguna vez le escuché a Luis decir que “ir al cine, ver una película, es como entrar a un confesionario, entablar una conversación con alguien que nos quiere contar una historia”. El director se abre de capa para compartirte, a través de imágenes en movimiento, lo que cree, sueña, siente y espera. Y eso, a nosotros como espectadores, nos conmueve, nos hace pensar y nos convoca como seres humanos.

Luis, en el artículo antes referido, se confiesa con nosotros, nos confía su historia cinéfila: “Pasé mi adolescencia viendo melodramas —en la realidad y en la pantalla—, y quizás aprendí algo diferente a mis compañeros de edad, quizás se sembró en mí el deseo de hacer el escenario de la vida un poco más humano.4En el número 68 de Xipe totek, en el artículo “Mi historia cinéfila de fronteras”, Luis sigue compartiendo su relación con el cine, las fronteras y el diálogo con la cultura:

Nací en Tijuana, México, en la frontera más transitada del mundo. Cruzar fronteras está en mí desde que nací, cuando lo común era tener la mica para cruzar la línea, y poco se hablaba de indocumentados. Así me crié, entre dos mundos, que luego empezaron a hacerse muchos mundos, gracias al cine.5Aprendí a confrontar y profundizar la vida no con los textos de una decaída filosofía neoescolástica sino con Bergman, De Sica, Fellini, Visconti..., con Godard en Sin aliento (A bout de soufflé), Buñuel en Los olvidados y Nazarín, René Clement en Gervaise, Jean Renoir en La gran ilusión, Visconti en Rocco y sus hermanos y El gatopardo, y con la Simone Signoret en Room at the Top (Almas en subasta)... Ellos estuvieron conmigo toda mi formación, hasta mediados de los setentas cuando otros nuevos cineastas fueron apareciendo.El cine no dejó de acompañarme durante mis primeros 25 años como sacerdote jesuita en la inserción, la pastoral rural y suburbana, las comunidades de base, la teología de la liberación, la docencia y la formación, la teología fundamental, los cambios y las crisis con la C.G. 32,6 el doctorado en Cataluña, el inicio y el crecimiento de la Primera Etapa en Guadalajara. [...] con el cine sigo apostando a hacer de este mundo un hogar de todos más humano, más digno, más justo.7

Para Luis el cine es una forma de contar historias, y supo entrelazar esas historias con la propia vida, con la teología y el trabajo pastoral. En sus clases, conferencias, publicaciones y en los Ejercicios Espirituales hacía referencia a películas, y, con esto, nos ayudaba a profundizar más en la realidad, a descubrir a Dios “en el cine como en la vida” y a asumir un compromiso social.Después de que el Centro de Reflexión Teológica (crt) publicó su tesis doctoral, Luis escribió varios libros que tienen que ver con el cine, la teología y la espiritualidad. A mí me gustó mucho el de "Imágenes del espiritu en el cine" que es una fuente clave en mis talleres de " cine y espiritualidad", o cuando coordino cine–foros. Comparto sólo el primer párrafo del capítulo que tituló “La espiritualidad en el cine”: A través del cine entramos en contacto con historias humanas refle-jadas en la pantalla, y en ellas y a través de ellas con el “espíritu” de hombres y mujeres: aquello que los guía, los anima, les da sentido a sus vidas, los hace sufrir y luchar, salir adelante y lograr sus espe-ranzas, vivir y morir. Si algo nos emociona como espectadores de las películas es precisamente estar en contacto tan vivamente con el espíritu de seres humanos, y entrar a ser parte de él.

En este libro y en otros como La vida en la pantalla. Del cine a la sociedad digital y Conducidos por la mirada: encuentros con el espíritu de las películas, así como en muchas reseñas cinematográficas que quedaron para la historia en las revistas Xipe totek y Christus, podemos gozar, identificar y celebrar ese espíritu que el cine nos regala y que Luis supo descubrir de manera sorprendente y muy humana.

A la luz de los Ejercicios Espirituales de Ignacio de Loyola, Luis propuso algunos métodos para ver cine y extraer de él algún provecho para nuestra vida. Éstos tienen que ver con la contemplación, con las repeticiones y con la aplicación de los sentidos.Con todo esto Luis nos invitaba a “valernos de la imaginación y de las imágenes para ir de lo visible a lo invisible, de lo que aparece a lo más profundo, a lo que se nos quiere dejar como acción del Espíritu. Abrir las puertas de los sentidos para descubrir la Imagen de Dios en las imágenes, el Espíritu en los espíritus”. Estos métodos yo los sigo usando mucho en mis cine–foros y los tengo como apéndices en dos de mis libros de cine y espiritualidad.Luis murió el 1 de mayo de 2025, en tiempo de Pascua.

Unos días antes, el 29 de abril, Pedro Reyes, s.j., y Paloma Robles lo entrevistaron en Ve y diles, el pódcast de la revista Christus, para que recomendara algunas películas que tuvieran que ver con la resurrección. De esa buena selección recuerdo la película japonesa–alemana Días perfectos, de Wim Wenders, que cuenta la historia de Hirayama, un hombre que trabaja en Tokio como limpiador de baños públicos y que encuentra belleza, sentido y realización en lo que hace y vive en su día a día. Luis consideró esta película como “una de las más hermosas y perfectas de estos últimos tiempos”. El día de la entrevista invitaba a reflexionar: “Hay gente que nos inspira... por cómo vive el día, cómo despierta, cómo se encuentra con las demás personas... ¿Con qué espíritu queremos vivir?”.

Quienes fuimos amigos de Luis, compañeros de misión, alumnos, o lo escuchamos en alguna conferencia, lo vimos celebrar y predicar en una misa o fuimos al cine con él, podemos decir que fue de esas personas que inspiran y nos ayudan a vivir una vida más humana, más plena, más perfecta... como nos ha invitado y nos sigue invitando hoy Jesús: “Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia”.

Fuentes documentales

Biblia de Jerusalén, Desclée de Brouwer, Bilbao, 2019

.García Orso, Luis, “Mi historia cinéfila de fronteras” en Xipe totek, iteso, Tlaquepaque, Jalisco, vol. xvii, Nº 68, pp. 377–382.

_______ “Miradas en una Cinta de Sueños” en Xipe totek, iteso, Tla-quepaque, Jalisco, vol. vi, Nº 22, junio de 1997, pp. 129–134.

_______ Conducidos por la mirada: encuentros con el espíritu de las películas, Buena Prensa, México, 2020.13. Jn 10, 10.

 

.** Licenciado en Filosofía y Ciencias Sociales por el iteso. Vicario parroquial en la parroquia del Sagrado Corazón, Chihuahua, y miembro de signis (Asociación Católica Mundial para la Comunicación). checoguz@hotmail.com

2. Sergio Manuel Guzmán García, El creer de/en los superhéroes. Una mirada de fe a las películas de Marvel,Buena Prensa, México, 2016, p. 5. 3. Luis García Orso, “Miradas en una Cinta de Sueños” en Xipe totek, iteso, Tlaquepaque, Jalisco, vol. vi, Nº 22, junio de 1997, pp. 129–134, p. 130.4. Ibidem, p. 131

4. Ibidem, p. 131.

5. Luis García Orso, “Mi historia cinéfila de fronteras” en Xipe totek, iteso, Tlaquepaque, Jalisco, vol. xvii, Nº 68, pp. 377–382, p. 377.6. Las siglas “C. G.” apuntan a la “Congregación General”.7. Ibidem, p. 379

7. Ibidem, p. 379.

8. Luis García Orso, Imágenes del espíritu en el cine, Buena Prensa, México, 2000. 9. Ibidem, p. 9.10. Luis García Orso, La vida en la pantalla. Del cine a la sociedad digital, Buena Prensa, México, 2016.11. Luis García Orso, Conducidos por la mirada: encuentros con el espíritu de las películas, Buena Prensa, México, 2020.12. Luis García Orso, Imágenes del espíritu en el cine, p. 25

8Luis García OrsO, s.j.:_______ Humanidad en lo No Humano, Centro de Reflexión Teológica, México, 1989._______ Imágenes del espíritu en el cine, Buena Prensa, México, 2000._______ La vida en la pantalla. Del cine a la sociedad digital, Buena Prensa, México, 2016.Guzmán García, Sergio Manuel, El creer de/en los superhéroes. Una mirada de fe a las películas de Marvel,Buena Prensa, México, 2016.

Fuente original:https://revistas.iteso.mx/index.php/XT/article/view/303/265